En la cornisa que preside el ala Este de la ciudad de Las Palmas de Gran Canaria, premiado con una vista privilegiada sobre la capital, se encuentra el barrio de Salto del Negro. Y en sus laderas cuida de sus perros José Juan Rodríguez Santana, gran entusiasta del Perro de Presa de las Islas y defensor a ultranza de nuestras costumbres. Rodeados de ganado y caballos -otra de las aficiones de Juan- se crían sus perros en un ambiente rural, pese a la cercanía con la urbe capitalina.
Nuestro aficionado conserva un ejemplar de avanzada edad, por el cual parecen no pasar los años. "Rocote", que así se llama el semental, presenta una vitalidad impropia para sus años y es, a día de hoy, un destacado reproductor y fiel transmisor de castas grancanarias casi desaparecidas por la incomprensiòn y el desánimo que ha sacudido a los aficionados de esta Isla. "Rocote" proviene del criadero de otro no menos conocido criador afincado en la Caldera de Bandama: Carmelo Valido, quien ha dado sobradas muestras de veteranía y experiencia en la crianza de nuestra raza señera.
"Rocotoe" ha sido emparejado con "Atigrada". notable reproductora del criador guiense Ismael Santiago, quien ha sabido conjugar ejemplares de gran tipicidad, valliosa genética, poderoso temperamento y salud articular contrastada, puesto que ambos animales se encuentran libres de la tan repudiada displasia de cadera.
Pedro Sarmiento, que quiso dejar constancia de esta visita para la posteridad, grabó estas imágenes que nos remontan a otros tiempos en los que ejemplares de esta categoría eran mucho más abundantes.
Por otro lado, se añaden imágenes de algunos ejemplares del criadero de Ángel Casimiro, en Telde, así como un valioso ejemplar ya fallecido y afincado en Ingenio, buen transmisor de líneas que ya resultan muy escasas hoy en día.
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